Ante el vertiginoso desarrollo tecnológico actual, los ciudadanos necesitan constantemente asimilar nuevos conocimientos, asumir los nuevos desafíos que plantean los productos y los servicios que el mercado les ofrece. Se hace por tanto necesario un profundo conocimiento de la naturaleza científico-tecnológica sobre la que se apoya la creación de los bienes de consumo, así como una adecuada comprensión de las implicaciones asociadas a su producción. Las consecuencias sociales y ambientales, valorando el impacto del uso de los recursos energéticos, de los procesos de obtención de materias primas, de la generación de residuos o de las potenciales desigualdades sociales vinculadas a estos aspectos, son cuestiones que el alumnado debe comprender y analizar críticamente. Esta comprensión se hace necesaria tanto desde un punto de vista de usuario como de potencial creador tecnológico. La responsabilidad asociada a dicho desarrollo tecnológico es un objetivo propio de la materia de Tecnología e Ingeniería, contribuyendo en conjunto a los objetivos de la etapa alineados con un desarrollo sostenible y accesible, y la creación de una sociedad justa e inclusiva.

Las competencias específicas de la materia de Tecnología e Ingeniería incluyen numerosos aspectos propios de la resolución de problemas tecnológicos en un nivel avanzado. El salto respecto a la etapa educativa anterior es considerable, ya que se movilizan saberes propedéuticos que requieren de un desarrollo competencial específico ligado a los trabajos propios de la ingeniería, desde un enfoque inclusivo y no sexista: el trabajo en equipo coordinando y comunicando correctamente acciones propias del diseño avanzado, la automatización de procesos, la selección de materiales, el uso de herramientas digitales y el análisis crítico de los resultados son algunos de los aspectos asociados a dicho desarrollo competencial. En este sentido, la materia contribuye considerablemente al desarrollo de las competencias clave, ya que todas ellas impregnan el proceso tecnológico propio de la ingeniería vinculado al desarrollo de proyectos que respondan a necesidades y den soluciones a problemas desde un punto de vista accesible y sostenible. La accesibilidad es un componente necesario del proceso tecnológico, ya que en una sociedad moderna y plural se han de tener en cuenta las necesidades desde la diversidad, favoreciendo la inclusión efectiva de todas las personas. Esta materia desarrolla aspectos técnicos relacionados con las competencias clave digital, matemática y en ciencia, tecnología e ingeniería, así como con otros saberes transversales asociados a las competencias clave en comunicación lingüística, personal, social y de aprender a aprender, ciudadana y en conciencia y expresiones culturales. El emprendimiento, las relaciones propias del entorno laboral y la necesidad de recurrir a conocimientos propios de otras materias encajan en el desarrollo competencial de la materia de Tecnología e Ingeniería, de manera que confieren al alumnado un bagaje óptimo para desarrollar un perfil de salida idóneo de la etapa.

La materia de Tecnología e Ingeniería contextualiza algunos de los principios pedagógicos del Bachillerato favoreciendo la capacidad del alumnado para aprender por sí mismo, para trabajar en equipo y aplicar métodos de investigación apropiados. Asimismo, la materia tiene una función orientadora tanto desde el punto de vista educativo como profesional, con una marcada perspectiva de género.

La capacidad de organizar de manera efectiva el aprendizaje y de trabajar en un entorno colaborativo respetando los principios de igualdad universales son aspectos que la materia de Tecnología e Ingeniería impulsa a través de sus competencias específicas. En este sentido, no solo la capacidad de aprendizaje aparece como foco de la transversalidad de la materia, sino también una adecuada visión del futuro educativo y/o laboral al cual se puede acceder adquiriendo las competencias desarrolladas y mediante la creación de vínculos entre el entorno educativo y otros sectores sociales, económicos o de investigación. Igualmente, ciertos hábitos y destrezas, como la capacidad de expresar adecuadamente las ideas propias ante una audiencia, o la lectura, tanto en general como de textos propios de la materia, son potenciados a través del desarrollo curricular. Por último, la materia de Tecnología e Ingeniería no es ajena a la inclusión educativa de alumnado con diversidades funcionales, contemplando los apoyos educativos necesarios para garantizar su éxito académico.

El enfoque didáctico adoptado en el abordaje de la materia de Tecnología e Ingeniería contribuye a la promoción de vocaciones en el ámbito tecnológico entre el alumnado. Así mismo, debe favorecer el desarrollo competencial del alumnado, articulando los saberes en torno a situaciones de aprendizaje bien contextualizadas que permitan resolver problemas y proyectos del ámbito de la ingeniería. Estos requerirán progresivamente un grado creciente de rigor científico y técnico en los procesos de modelización de las situaciones, en el empleo de conocimientos y en las estrategias interdisciplinares que convergen para dar solución a los desafíos planteados. En este sentido, se facilitará al alumnado un conocimiento panorámico del entorno productivo, teniendo en cuenta la realidad y abordando todo aquello que significa la existencia de un producto, desde su creación, su ciclo de vida y otros aspectos relacionados. Este conocimiento abre un amplio campo de posibilidades al facilitar la comprensión del proceso de diseño y desarrollo desde un punto de vista industrial, resultando de especial interés la incorporación de sistemas de fabricación digital que aportan un gran potencial.

En la etapa de Educación Secundaria Obligatoria, el alumnado ya se ha iniciado en realizar proyectos tecnológicos de creciente nivel de complejidad y precisión técnica en la materia de Tecnología y Digitalización, y es posible que también en Tecnología de cuarto curso, en las cuales ha ido adquiriendo competencias específicas, algunas de las cuales se continuarán desarrollando en esta materia. Las competencias de esta materia y el conjunto de saberes que se articulan con ellas tiene una clara finalidad: preparar y dotar al alumnado para estudios posteriores relacionados con el ámbito de la ingeniería o el propio desempeño de estas actividades profesionales en el futuro.